nedeľa 17. decembra 2017

Los fanáticos de los EE. UU. Querían a Jürgen Klinsmann pero podrían lamentar su salida

Muchos fanáticos estadounidenses probablemente alentarán la marcha de Klinsmann, al igual que muchos de ellos dieron la bienvenida a su cita en primer lugar. La soleada estrella de Alemania había encantado hace muchos años cuando prometió elevar el nivel de los jugadores y la competencia. En 2016, su acto se había cansado: muchos fanáticos vieron a un hombre que se negó a aceptar la culpa por los errores, y muchos de sus jugadores parecieron renunciar a él.

La política volátil en Estados Unidos también jugó un papel, a pesar de que muchos fanáticos no lo admitirán. Como la reciente carrera presidencial marcó un giro hacia el interior del país, muchos fanáticos se angustiaron con e l enfoque percibido de Klinsmann en los jugadores alemanes-estadounidenses.Esta actitud fue vista arriba y abajo en el escalafón de desarrollo, y los padres http://src.gcuc.edu.gh/index.php?option=com_k2&view=itemlist&task=user&id=90165 en los niveles juvenil y de ODP se enfurecieron, sintiendo que sus hijos nunca recibirían una sacudida justa bajo el régimen de Klinsmann. Su descontento se expresó cuando una de las mayores estrellas del juego femenino, Abby Wambach, criticó a los miembros inmigrantes del escuadrón, provocando algunos reproches enojados, pero en retrospectiva, ella simplemente estaba expresando una corriente que recorre la nación en su conjunto.

Como resultado, en el último año, todo paso en falso cometido por Klinsmann se amplió. Un prominente blogger mantuvo una lista que pretendía demostrar que el gerente era el peor de la historia de Estados Unidos. (De hecho, Klinsmann h ttps://www.kickstarter.com/profile/900871360/about termina con el segundo mejor récord como entrenador, solo detrás de Arena.John Kowalski, quien entrenó solo dos juegos en 1991, no puede ser contado en realidad). Algunos periodistas pidieron su despido, lo que Klinsmann calificó de irrespetuoso. ¿Qué opciones tiene Jürgen Klinsmann? La brutal verdad: no muchos Leer más

Klinsmann es casi inocente, por supuesto. Él alienó a un buen número de https://speakerdeck.com/mccaffrey76mccaffrey jugadores con sus tácticas y selecciones. También estuvo más que feliz de colgar a algunos de ellos para que se sequen en público: su tratamiento de Landon Donovan en el período previo a la Copa del Mundo de 2014 fue particularmente cutre.

El alemán no siempre http://www2.tku.edu.tw/~tacx/html/userinfo.php?uid=3045510 se distinguía detrás de las escenas tampoco. Su trabajo de des arrollo en los EE. UU. Fue mediocre en el mejor de los casos: sus entrenadores elegidos desperdiciaron dos oportunidades de clasificarse para los Juegos Olímpicos, y toda la pirámide de desarrollo de la nación puede considerarse un desastre.Su afición por las escrituras agotó a la gente de base en South Prairie, que vio un jefe mucho más controlador y exigente de lo que sugería la soleada fachada pública de Klinsmann. Y, sí, el equipo de Klinsmann perdió algunos malos olores.

A pesar de esas advertencias, Klinsmann deja el fútbol en Estados Unidos en un lugar mejor de lo que lo encontró. El programa de Klinsmann obtuvo grandes victorias: derrotando a Italia, Alemania y Holanda. Su equipo terminó un respetable cuarto puesto en la Copa Centenario.


No es ninguna pena perder ante Argentina, después de todo, y se separó del Grup o de la Muerte en Brasil. Él ganó la Copa Oro 2013. Y consiguió la primera victoria de los EE. UU. En el Azteca, batiendo un largo récord de futilidad.

Klinsmann también aportó potencia real al juego estadounidense.Por primera vez, los estadounidenses tenían una verdadera superestrella internacional a la cabeza, y eso valió la http://thygesen13connell.pen.io pena en formas difíciles de medir. La emoción por el programa seguramente se disparó entre los fanáticos casuales; con eso vinieron nuevas expectativas, algo que Klinsmann activamente cortejó. Por primera vez, los jugadores de fútbol estadounidenses se vieron sometidos a una presión real, al igual que todos los demás deportistas. Decir que fue un cambio radical podría venderlo poco.

Klinsmann también amplió enormemente el grupo de jugadores, con la estrella adolescente Christian Pulisic como la última gema que se desenterrar á (el delantero de Dortmund también fue codiciado por Croacia). . Los jugadores clave que surgirán bajo http://www.gotplant.co.za/author/mccallum45dolan/ Klinsmann incluyen a Fabian Johnson, DeAndre Yedlin, Julian Green, Bobby Wood, Jordan Morris y Aron Johansson.A pesar de todos los apretones http://www.chictopia.com/mccallum50mercado de manos que han acompañado las selecciones de Klinsmann, una mirada a la gran cantidad de nombres que trajo al programa muestra a un gerente con un ojo católico, dispuesto a correr riesgos con chicos de todas las ligas y todos los niveles.

Lo que nos lleva a lo único sobre lo que Klinsmann tenía poco control. La simple verdad es que, a pesar del hecho de que miró a más de 70 hombres en el último año, su grupo de talentos es en realidad más débil de lo que nunca fue.

La portería estadounidense, que una vez fue una fortaleza internacional, s e ha secado, con Tim Howard lesionado y Brad Guzan simplemente inútil. Simplemente no hay mucho talento de primer nivel en la tubería, el excelente Pulisic a un lado. Clint Dempsey, marginado por una dolencia cardíaca, fue una omisión asesina cuando comenzó el maleficio.Y ciertos jugadores, Jermaine Jones, Kyle Beckerman, Guzan, están empezando a parecer muy viejos. (Esto se refleja también en Inglaterra: solo http://armorgames.com/user/mccallum63thygesen un jugador, Lynden Gooch, está consiguiendo un tiempo de juego estable y significativo, y eso en uno de los peores clubes de la Premier League.) Los defensores de la MLS señalarán a Michael Bradley y Jozy Altidore en Toronto ; pero el hecho es que la liga doméstica está varias muescas por debajo de las mejores competiciones del mundo.

Quien se haga cargo del trabajo tendrá que lidiar primero con ese problema. También deberá intentar reparar una pirámide d e desarrollo fracturada y fragmentada que simplemente desperdicia demasiado talento. Y tendrá que evitar que el equipo nacional de EE. UU. Se convierta en club nuevamente, una idea insidiosa que Klinsmann sabiamente aplastó.

Pero los fanáticos obtuvieron su deseo el lunes por la tarde.Al igual que muchos en esta nación después de las elecciones presidenciales, pueden vivir para arrepentirse.

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